Sentirse bien es totalmente distitnto a como me lo habían descrito, alomejor es porque es sentir es algo que es subjetivo y no todos se sienten bien de la misma forma o con las mismas cosas. Me he dado cuenta con el paso del tiempo que siempre van a haber obstáculos en el camino y que la valentía se esconde en el alma y desborda por las pupilas, la valentía que se irradia cuando aún estando en el suelo, lleno de tierra, puedes levantar la frente en alto, y la gente que está sobre ti bajará su mirada admirando con emoción la valentía de ese ser que se vuelve a parar, y se limpia sus ropas para poder seguir el rumbo "Siempre habrán obstaculos en el camino pero no dejo que estos me detengan". Lo más preciado que alomejor el ser humano puede tener son sus metas, sus ideales porque nadie puede quitarselos y por siempre serán suyos...
He aprendido a creer de corazón en las segundas oportunidades, en que la gente merece una oportunidad para equivocarse y aprender y otra para enmendar. Que nadie es superior al otro como para juzgarlo, no mientrás no se reconosca sus fallas propias y que nadie puede negar la oportunidad, a ningún ser vivo, de ser mejor...
He aprendido que nadie, repito, NADIE es un desgraciado en el mundo y fuera de él, que cada cosa tiene su encanto y su gracia y que a veces las mas simples son las más bellas (mirar un cielo nocturno estrellado acostado en un prado por ejemplo...eso no tiene precio). También aprendí que no es bueno pagar con la misma moneda de odio, y devolver tragos amargos porque al final, lo único que se está haciendo es crear más odio y dolor. Es más grande y gratificante romper con ese ciclo y perdonar. Como un buen revolucionario diría "Poner la otra mejilla".
He aprendido que la palabra amigo se limita a muy poca gente y en conjunto con esa conclusión me doy cuenta que es mas importante la calidad que la cantidad.
He aprendido que la familia, sea como sea, en algún momento de esos que nosotros llamamos "a la hora de los qué hubo" son una de las pocas personas que están ahí incondicionalmente y que si bien, la familia es un equipo, hay diferencias entre sus miembros y la empatía es la base de cualquier relación e incluso me atrevería a decir que de la vida.
Y como para terminar este escrito que nació en un momento "inoportuno" He aprendido que es amar y aunque me encantaría es una cosa que no puedo explicar. Platón nos dice que el ser humano tiende a amar y se mueve por la fuerza del amor. Este amor no necesariamente tiene que ser de parejas, puede ser un amor a una cosa o alguna otra persona como por ejemplo los amigos o la familia. Aprendí a amar de una forma casi patológica, sientiendolo y estando en la situación comencé a sentir un cariño que desbordaba y no se contenía dentro de mi cuerpo o dentro de mi mente; era, es y espero que sea un cariño que pedia a gritos ser recibido, un cariño completamente desinteresado, no esperando ni siquiera el "te amo" de vuelta. Pero no puedo negar que cuando me lo devuelves de la forma en que solo tú sabes hacerlo, mi alma rebosa de alegría y comienza a transformarse todo eso en lágrimas. Nuestro cuerpo es maravilloso porque manifiesta algo tan complejo como el amor en una bella y brillosa lágrima...Sí señor lector, yo he aprendido lo que es amar pero no lo aprendí sola porque tú, amor mío, me enseñaste con paciencia, con delicadeza y con suavidad...
Espero seguir aprendiendo y espero tener mis segundas oportunidades. Hacer todo lo que tenga que hacer y decir todo lo que tenga que decir antes de que ese ser superior decida que mi vida acabó...
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